jueves, 19 de febrero de 2009

La Mosca

cuando
este vacío que se siente a veces
aparece en uno,
no somos más que el reflejo de un ente
por entre los caminos de la realidad

un extraño movimiento que se abre en silencio
con la transparencia del aire ante los ojos
resfregandonos el aire por el cuerpo

una mosca, o su sombra que la sigue cuidadosamente?
o es la mosca la sombra de la sombra de la mosca?
Y como si fuera poco la sombra de la sombre de la mosca
vuelca sus rumbos de vanegante del suelo hacia mi rostro
y se posa en mi mejilla derecha con un beso mortal de oscuridad
abriendo esas húmedas, pero complejas mandibulas succionantes
entrándo en una escapatoría de confusión de las bestias volantes
yo me pregunto igual que siempre
si las moscas son simples sombras de un especro
que deambula frente a nosotros con una forma
impercetible ante nuestros ojos
es posible que los seres del otro lado que nadie ve
anden por allí y que nuestro cuerpo sólo sea su reflejo
sólo seamos sombras de un algo que no creemos real
un reflejo que no queremos admitir
al igual que la sombra de la mosca
que es más real acaso?
la mosca podría vivir sin su sombra entonces?
y aún estamos nosotros reinando entre las bestias
el nacimiento propio se fortalece en un comienzo
pero el desgaste nos arruga la piel y nos quita
algo más que la felicidad
y si nuestro cuerpo es comido por gusanos
nuestra sombra se reparte aún más por el mundo.

Solo el silencio puede brindarnos la verdadera felicidad
el sonido que se hace al cerrar un ojo
las melodias de la piel acariciandose
la violencia del agua en la ducha sobre el cuerpo
los sonidos que no percibimos
son los culpables de nuestra angustia
y aún nos engañamos creyendo que la lengua
es la santa solución a todas las respuestas del alma.

1 comentario:

Perséfone dijo...

Las moscas se merecen mi respeto.
La moscas la llevan!

YEAH!