domingo, 6 de junio de 2010

Redshift

Caminar de noche tapado de hoja en hoja

Con el sonido áspero de los gorriones espaciales

Y el bostezo oscuro de un perro cojo del ojo,

Rogando con el diario al pálpito, huerto de dedos,

De dedos vidriosos descociendo toallas huesudas,

Descendiendo como hormigas explosivas

Hasta desaparecer en la succión de tu lengua.

La suavidad me apresa en tus dibujos,

Y estos toda la vida en mis colores,

Como mañanas excitándose por las noches

Y te asomas por fuera de una ventana de plasticina

Escapando de tus moldes con uñas por miradas.

Ya no sé que es más idiota

Si mi silencio o tus verdades.

1 comentario:

Anónimo dijo...

dicen que el hombre se vuelve mas osado en sus poemas, y que las letras de sus poemas, son mas osadas cuando las lee un hombre...