martes, 27 de octubre de 2009

esposas de lana

y que las ojeras se hagan enormes
y los sillones sean hechos de vacío,
y los oídos se sellen para siempre
y que los vientos azoten las ventanas,
y las lluvias sean absorbidas por el cielo
como si estuviera comiendo fideos
y el sol se canse de alumbrar y se queme
y las mañanas sean oscuros amaneceres
y las tardes no tengan anocheceres
y los barcos no tengan estrellas para guiarse
y las brújulas engañen a su amor eterno del norte
y las guirnaldas en las murallas se incineren un trás otra
y las plantas no tengan agua para hacer fotosintesis
y nos vallamos todos evaporando hasta la luna
y nos acurruquemos en un cráter para dormir
y soñemos con la lana frágil de la respiración espacial
sin oxígeno, sin oxígeno la desesperación es grande.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Mientras exista aire, respiraré; Mientras exista la luz, sonreiré; Mientras haya agua, las olas abrazaré... Las esposas de lana sumergidas en el océano, abrumadas con la luz del sol y empujadas por el viento de tus pensamientos, sólo serán un mal recuerdo del olvido...