lunes, 4 de enero de 2010

nuevación

Regresar a la misma piedra
a los santos amargos del precipicio
donde se ciernen las gaviotas al vuelo
y donde tropiezan las olas con sus desechos.

regresar y sentarse en postura de piedra
intentando moldear las mismas sonrisas
los mismos horizantes de un nunca jamás.